Con casi 70 años en sus espaldas el Land Cruiser se ha convertido en un icono para Toyota, que en este 2020 se actualiza en varios frentes. El vehículo todoterreno japonés adopta ahora un motor más potente y ofrece un equipamiento tecnológico ampliado, tanto en términos de infoentretenimiento y conectividad como de seguridad. El paquete ‘Black Pack’ también está haciendo su debut con una estética más deportiva.
Los caballos suben y el consumo baja. 

El Diésel de cuatro cilindros y 2.8 litros ha aumentado la potencia en 27 caballos de fuerza (204 en total) y el par motor en 50 Nm (500 en total); acoplado a una transmisión automática de seis velocidades, esta unidad de potencia contribuye a un 0-100 significativamente mejorado (9,9 segundos). Lo mismo el consumo medio de combustible declarado en el mixto, bajó hasta los 7 l / 100 km.

El Land Cruiser adopta ahora una pantalla táctil con gráficos personalizables: compatible con los protocolos Android Auto y Apple CarPlay, incluye la actualización inalámbrica de mapas de navegación y servicios en línea (tráfico en tiempo real, búsqueda de Google, alertas de estacionamiento, clima y radares) durante tres años. Por el lado de la seguridad el equipamiento actual de Adas trae consigo el crucero adaptativo inteligente y el frenado automático con reconocimiento (incluso de noche) de peatones y ciclistas (solo durante el día).

Desde el punto de vista estético, la novedad radica en un paquete opcional que incluye la parrilla delantera en cromo oscuro, detalles negros, como los biseles de los faros antiniebla, las tapas de los retrovisores exteriores y las molduras de la línea de cintura, luces traseras bruñidas y la barra trasera cromada oscura.