Togg T.10X / La primera unidad acaba de ser entregada al Presidente de Turquía Recep Tayyip Erdoğan.

La producción y las entregas del SUV Togg T.10X totalmente eléctrico de Turquía acaban de comenzar y las llaves del primer ejemplar se entregaron al Presidente Recep Tayyip Erdoğan.

Togg T.10X / Presidente de Turquía Recep Tayyip Erdoğan.

Turquía ha estado trabajando en su proyecto EV de diseño propio durante bastante tiempo y, mientras hablaba con los periodistas en la entrega, el Presidente Erdoğan señaló que su oficina realizó el primer pedido del T10X en 2019.

“Hicimos el primer pedido de Togg, nuestra marca nacional que enorgullece a nuestro país, en 2019. Y hoy recibimos el primer vehículo inteligente. Togg ha surgido, se ha desarrollado y ha alcanzado su nivel actual como símbolo del progreso tecnológico, el desarrollo económico y el prestigio mundial de nuestro país. Estamos comenzando a ver a Togg en las carreteras a partir de hoy”.

Togg T.10X / Presidente de Turquía Recep Tayyip Erdoğan.

Si bien Togg es una marca nueva sin antecedentes comprobados, eso no ha impedido que los locales brinden su apoyo a la empresa. De hecho, el medio Daily Sabah informa que más de 177.400 personas enviaron pedidos anticipados en los primeros 21 días de estar disponible. Gracias a esta fuerte demanda, la compañía ha tenido que aumentar sus planes de producción para 2023 desde las 12.000 unidades hasta las 20.000.

La primera versión del SUV Togg T10X que llega a las manos de los clientes cuenta con un único motor eléctrico montado en la parte trasera que produce 218 hp y 350 Nm de torque. Los clientes pueden elegir entre dos paquetes de baterías de diferentes tamaños que ofrecen hasta 314 km y 523 km de alcance, respectivamente. Este modelo puede alcanzar las 100 km/h en 7,4 segundos.

Llegará en octubre una versión más potente. Tiene dos motores eléctricos con 435 hp y 700 Nm de torque y puede alcanzar las 100 kph en 4.8 segundos. Su batería también se puede recargar del 20% al 80% de su capacidad en solo 30 minutos.

El diseño de la carrocería fue encargado a Pininfarina.