Dallara DW12-Chevrolet del Juncos Hollinger Racing, con Callum Ilott

El equipo del argentino Ricardo Juncos regresó a la IndyCar desde su participación en las “500 Millas de Indianápolis” de 2019.

Lamentablemente un problema eléctrico impidió que el Dallara DW12-Chevrolet del Juncos Hollinger Racing, con Callum Ilott, completaran el Gran Premio de Portland este fin de semana.

Dallara DW12-Chevrolet del Juncos Hollinger Racing, con Callum Ilott en boxes por un problema eléctrico.

Clasificó en el 19º lugar, estuvo castigado por el accidente múltiple del comienzo pero Ilott llegó a trepar hasta la octava posición hacia la mitad de la competencia cuando se quedó detenido en pista por una falla eléctrica en su Dallara # 77. Pese a que se reparó y volvió a pista, la decisión final fue retirar el auto a falta de diez giros.

Dallara DW12-Chevrolet del Juncos Hollinger Racing, con Callum Ilott

Pese a todo Ricardo Juncos se mostró satisfecho por el desempeño, tanto porque se armó un grupo competitivo en un mes y mostraron ser competitivos tanto el auto como el joven piloto pudieron haber aspirado a un Top 10.

Dijo Ricardo Juncos “Creo que veníamos con una estrategia para terminar capaz en el Top 10 seguramente, octavo o séptimo como veníamos, pero se paró el motor”, “Vinimos al box a tratar de reparar, no se encontró el motivo por el cual fallaba; de hecho, el motor arrancó de vuelta sin problemas. Decidimos cambiar la computadora y la batería por las dudas, pero para ese momento perdimos 20 vueltas”. “Nos pusimos en modo de entrenamiento, tratar de seguir girando, seguir haciendo paradas en los pits y seguir trabajando para el fin de semana que viene en Laguna Seca y tratar de ir limando lo poquito que podemos limar de cara a la última también. Nos estamos tomando todo con mucha calma y tranquilidad”.

Juncos Hollinger Racing / Callum Ilott

Ilott, quien hizo su primera carrera en la serie estadounidense con la autorización de Ferrari, superó las expectativas de Juncos, dado el grado de aprendizaje y entendimiento de la dinámica de trabajo en un fin de semana condensado como el de Portland sorprendiéndole la velocidad que mostró e incluso logró ir adelante de veteranos como el mismísimo Josef Newgarden.