Los dos fabricantes franceses han firmado un acuerdo para el desarrollo de una batería sólida para ampliar la autonomía reduciendo los precios.

En el marco de la Cumbre de Airbus (‘Airbus Summit), el fabricante de aviones anunció una asociación con el grupo Renault. Las dos empresas quieren reducir drásticamente las emisiones de CO2 (emisiones cero para 2050) y unir fuerzas para mejorar las tecnologías relacionadas con el almacenamiento de energía. En concreto, este acuerdo permitirá a Aribus “dar forma al futuro de los aviones híbridos-eléctricos” y a Renault mejorar sus vehículos eléctricos.

Esta colaboración también se centrará en optimizar la gestión de la energía y mejorar el peso de la batería. Para 2030, Airbus y Renault tienen la intención de duplicar la densidad energética de las baterías cambiando las celdas químicas de iones de litio por baterías de estado sólido.

Y eso no es todo, esta colaboración entre los dos buques insignia de la industria francesa también cubrirá “el ciclo de vida completo de las futuras baterías, desde la producción hasta la reciclabilidad”.

Aviones híbridos y coches eléctricos están en la misma lucha…
Impulsados ​​por la misma ambición de innovar y reducir la huella de carbono, nuestros equipos de ingenieros discuten con los de Airbus para reunir tecnologías transversales que permitan tanto operar aviones híbridos como desarrollar vehículos del mañana”, dice Gilles Le Borgne, Director de Ingeniería, Grupo Renault.

Esta asociación intersectorial con Renault Group nos ayudará a ofrecer la próxima generación de baterías como parte de la hoja de ruta de electrificación de Airbus”, explica la Señorita Sabine Klauke, Directora de Ingeniería de Airbus.

El problema actual es que el electrolito, que hace la conexión entre el polo negativo y el polo positivo, es líquido. Esto conlleva un riesgo de combustión que nos obliga a poner en marcha contramedidas eficaces y seguras pero costosas, declaraba el ingeniero Gilles Le Borgne en las columnas de Le Parisien.

«Para limitar los riesgos en caso de accidente, Airbus y Renault se ven obligados a colocar cápsulas que representan el 20% del costo de la batería. Si lo retiramos, el precio de un automóvil eléctrico puede eventualmente bajar para el individuo y podría ganar autonomía«, agregó el Director de Ingeniería de Renault. El sueño del ingeniero sería que un auto eléctrico pudiera viajar de París a Marsella sin recargar…(casi los mismos sueños que se tenían los ingenieros hace 100 años cuando había pocas estaciones para recargar gasolina)

Héctór Daniel Oudkerk