Los reglamentos del Hypercar, permiten a los fabricantes instalar en sus automóviles un tren motriz híbrido que combina un motor de combustión interna – ICE, conectado al eje trasero – y un motor eléctrico con sistema de recuperación eléctrica – ERS – montado en el eje delantero.
«Para crear el motor para el 499P, aprovechamos la experiencia de Ferrari en Fórmula uno como en autos de calle«, explica l´ingegenere Lucio Calogero, Jefe de Diseño y Desarrollo de Tren Motriz para Endurance Cars. Del V6 instalado en el 296 GTB, derivamos el motor del 296 GT3 y luego, con las modificaciones apropiadas, el motor del hypercar 499P.
El motor de combustión interna es capaz de proporcionar a las ruedas una potencia máxima de unos 680 CV (500 kW) que, sumado a los 200 kW (272 CV) garantizados por el motor eléctrico, permite que el 499P «se beneficie de una potencia total potencial cercana a los 1.000 caballos de fuerza«, dice Lucio Calogero. Sin embargo, el reglamento técnico del WEC nos obliga a limitar la potencia entregada en cualquier momento a unos 500 kW en total, que se llega cuando se activa la tracción a las cuatro ruedas (a partir de 190 km/h).
El Ferrari 499P es un automóvil que utiliza algunas de las tecnologías más avanzadas de la industria automotriz en la pista. «En total, el motor de combustión interna consta de unos 500 componentes especiales que se ensamblan en los departamentos de prototipado y que se han fabricado con el objetivo de reducir el peso al mínimo, utilizando materiales que permitan obtener la mejor relación entre resistencia y ligereza«.
¿Cuáles son las características del motor del 499P? «Se trata de un motor de seis cilindros de 3 litros abierto a 120°, cuyos turbocompresores están dispuestos dentro de los dos bancos, es decir, una arquitectura conocida como Hot V», explica l´ingegnere de la marca con sede en Maranello. Todos los componentes del motor son estructurales, y fueron rediseñados específicamente para el 499P para convertirlo en un motor portador, es decir, un elemento estructural del chasis».
Diseñar y poner a punto un motor para carreras de resistencia es un ejercicio que requiere la consideración de múltiples factores. «Su rendimiento y fiabilidad se desarrollaron en los bancos de pruebas de la fábrica de automóviles de carretera«, explica Calogero. «Comenzamos con los bancos dinámicos, donde se calibraban el rendimiento y los controles, y luego nos fijamos en la fiabilidad, un aspecto fundamental en las carreras de resistencia a las que dedicamos cerca de 1.000 horas de desarrollo. En esta etapa, el trabajo ha continuado en el banco dinámico que tenemos a nuestra disposición en Maranello y el refinamiento de las actuaciones en la pista. Y esto durante los meses dedicados al desarrollo que siguieron al Shakedown, llevado a cabo el 6 de julio de 2022 en el circuito de Fiorano«.
«Al volante, buscamos un motor que sea un aliado, que sea muy sensible cuando lo necesitemos y que al mismo tiempo tenga un flujo lineal desde el comienzo de la potencia pico hasta el pico de máxima potencia«, explica Nicklas Nielsen, quien comparte asiento del 499P #50 con Antonio Fuoco y Miguel Molina. El auto ofrece a las tripulaciones una selección de diferentes mapas durante la carrera que les permite optimizar sus estrategias de acuerdo con diferentes factores. «Tenemos varias opciones dependiendo del tipo de circuito, el clima o las condiciones de la pista en un momento dado. El motor pequeño y compacto es muy eficiente, y esto es muy útil para nosotros bajo Full Course Yellow o cuando estamos detrás de otro coche y necesitamos ahorrar combustible«.
Héctor Daniel Oudkerk
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