ZBE

El distintivo ambiental sirve para controlar el acceso al centro de las ciudades (ZBE). Tomando el ejemplo español en total hay cuatro distintivos en función de los niveles de contaminación que emiten.

ZBE (zonas de bajas emisiones)

Las ZBE (zonas de bajas emisiones) son un veto a los vehículos sin etiqueta, y estas zonas tienen un denominador común: dejar fuera a los vehículos más contaminantes.

1.- Pegatina Cero emisiones . De color azul, está reservada a vehículos eléctricos de batería (BEV), vehículo eléctrico de autonomía extendida (REEV), vehículo eléctrico híbrido enchufable (PHEV) con una autonomía mínima de 40 kilómetros o vehículos de pila de combustible (hidrógeno).

2.- Pegatina ECO . Mitad verde mitad azul, está destinada a vehículos híbridos enchufables con menos de 40 km de autonomía, a los híbridos convencionales y a los de gas.

3.- Pegatina C . De color verde, deberán llevarla los matriculados a partir de enero de 2006 y diésel a partir de 2014 . Los de gasolina deben cumplir la norma Euro 4, 5 y 6 y en Diésel la Euro 6.

4.- Pegatina B . De color amarillo, deberán llevarla los matriculados a partir de enero del año 2000 y de diésel a partir de enero de 2006 . Los de gasolina deben cumplir la norma Euro 3 y en Diésel la Euro 4 y 5.

Los vehículos anteriores a esas fechas no tendrán etiqueta medioambiental , con lo que serán los primeros en verse restringidos en casos de contaminación.

La primera ZBE implantada en España fue la de Madrid Central, ahora ZBE Centro y en ella, solo pueden entrar los ECO y los CERO. 

Por miedo a estas restricciones de las ZBE (zonas de bajas emisiones) la gente está optando por modelos con etiqueta, pero no tanto de etiqueta CERO. Los preferidos etiqueta ECO suponen el 76 % del total y los CERO con poco más del 20 %.

Pero la mayor parte del pastel se las llevan los híbridos sin enchufe (azul y verde). Y en este grupo se incluyen los mild-hybrid  híbridos suaves que son térmicos en esencia con un start stop algo más potente. Mientras los eléctricos puros y los híbridos enchufables continúan llevándose una pequeña parte del pastel de las ventas. Los CERO-CERO de verdad siguen siendo solo un 11 % de los vendidos en España.

Pensemos que en España la infraestructura de recarga sigue siendo escasa y los enchufables y 100% EV se mantienen aún caros. Y estas son las causas principales de que los coches de enchufe, es decir eléctricos de batería y PHEV, mantengan unas cifras aún muy discretas en ventas.

El eléctrico más barato del mercado es casi 9.000 euros más caro que su equivalente ECO.  El Dacia Spring, parte de los 22.165 euros sin descuentos. Su equivalente el Sandero de GLP, con etiqueta ECO, hace lo propio en 13.640 euros, también sin ofertas. Son 8.500 euros más para el eléctrico, que además es menos potente que el de gas y con menos autonomía.

Las ayudas del plan  MOVES III aporta descuentos en torno a los 5.600 euros. Y todo eso contando con que hay achatarrar un vehículo de siete años o más. Si no, la ayuda se quedará en unos 3.600 euros. En definitiva, estos incentivos son claramente insuficientes  Además cargar en el domicilio durante la noche es lo que sale más económico pero la mayoría no tiene esa posibilidad.

Protocolo de contaminación

Sea como fuere, el que se alza como rey de las ventas de los eléctricos es el Dacia Spring, con 282 unidades. Segundo se sitúa el Tesla Model Y, que ha cosechado 233 matriculaciones. Y el tercer puesto sigue siendo para el Fiat e-500, con 231.

En lo que respecta a híbridos convencionales, los más vendidos de los alternativos, el Toyota C-HR ha superado al Toyota Corolla. Ambos se sitúan primero y segundo, con 1.803 y 1.558 unidades respectivamente. Cifras que ya de por sí muestran el tremendo abismo entre eléctricos e híbridos sin enchufe.

Y en los PHEV, en enero se impone el Ford Kuga en su versión híbrida enchufable (327), seguido del Jeep Compass (285) el Link & Co 01 (269).

Héctor Daniel Oudkerk

fuentes: https://www.abc.es/motor y https://www.motorpasion.com/